Con mucho terreno para evolucionar, especialmente en el ramo de la protección personal, los microseguros se erigen como una opción perfecta para dar protección a ciertos colectivos a los que el seguro tradicional no llega. La delimitación de sus coberturas, la prima reducida y la rapidez de su tramitación, se consigue gracias a una alianza imprescindible con la tecnología. Una vinculación cuya eficiencia mejora la experiencia del cliente y abre un camino a los mediadores para fidelizarle con nuevos productos.