Cada vez más, la ciberseguridad va calando entre las empresas como un asunto vital para su supervivencia. Si bien es cierto que tradicionalmente se han asociado más los ciberataques a las grandes compañías, la realidad es que cada vez más las pequeñas y medianas empresas se convierten en objetivos de los ciberdelincuentes, que buscan acceder a sus infraestructuras tecnológicas y hacerse con sus datos. Esta realidad, a su vez, se refleja en la preocupación de las pymes, ya que el 69% considera que su ciberseguridad es un asunto muy determinante de su capacidad para competir dentro de su propio mercado, según datos de nuestro último Informe de Ciberpreparación.
ARTÍCULO PUBLICADO EN LA REVISTA PYMESEGUROS Nº 117
En línea con esta preocupación, el 60% de ellas tienen coberturas ante incidentes ciber: el 30% cuenta con una póliza exclusiva de ciberseguridad y otro 30% tiene estas coberturas como parte de otra póliza que abarca también más áreas. Además, incluso dentro de las que no cuentan con ese respaldo, la preocupación es latente si tenemos en cuenta que un 18% tiene planes de invertir en una póliza ciber y otro 11% de incluirla como parte de una más general.
Los motivos detrás de este impulso a la contratación del seguro Ciber son variados: el 41% de las pymes lo hacen preocupadas por la seguridad de los datos, tanto los propios como los de sus clientes; el 39% por las posibles reclamaciones de sus clientes como resultado de un ciberataque; y otro 34% hace uso del ciberseguro como prueba de su ciberseguridad ante clientes y socios.
La amenaza es tal que, de hecho, el 43,7% de las pymes españolas sufrió al menos un ciberataque durante 2021. Detrás de este alto porcentaje de ciberataques también se esconde el hecho de que solo el 2% tienen los conocimientos necesarios de ciberseguridad para ser consideradas ciberexpertas, mientras que un tercio de ellas (34%) son consideradas como cibernovatas.
Además de apostar por el seguro Ciber para garantizar su seguridad, las empresas también optan por una mayor inversión en ciberseguridad. En 2020, destinaron a ciberseguridad el 20% de su presupuesto total de TI, mientras que en 2021 ese porcentaje aumentó hasta el 21,89%, lo que supone que, de media, invirtieron 145.000 euros en ciberseguridad el pasado año.
Las pequeñas y medianas empresas han hecho uso de ese presupuesto de forma variada, ya que el 60% ha apostado por invertir en hacer frente a las amenazas y vulnerabilidades que ya existían en el seno de su organización, mejorar la seguridad de los servicios y aplicaciones dirigidos a clientes y, por último, garantizar que los socios y los proveedores cumpliesen con sus propios requisitos de seguridad, algo especialmente importante en el actual contexto de popularización de los ataques a las cadenas de suministro.
A su vez, un 59% de las pymes españolas han utilizado ese presupuesto para mantener el cumplimiento de la normativa en esta materia, mientras que el 58% ha decidido realizar evaluaciones de ciberseguridad en sus infraestructuras de datos y tecnologías.
Esta inversión permite a las pequeñas y medianas empresas reforzar su ciberseguridad para poder seguir siendo operativas y evitar la fuga de clientes, un asunto fundamental a la vista de que un tercio (32%) de las pymes ha perdido clientes como resultado de un ciberataque. Por tanto, el avance en materia de concienciación sobre los peligros de la ciberseguridad es, sin duda, una buena noticia para el tejido empresarial español, que debe seguir invirtiendo en esta área para garantizar su propia resiliencia.
Nerea de la Fuente, directora de Suscripción de Hiscox
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