La IDD eleva a la distribución y a la mediación de seguros a la categoría de profesión regulada con reserva de actividad. Es decir, una profesión a la que hay que acreditar una formación elevada en materias financieras y de seguros para acceder a ella y, además, realizar formación continua anualmente. Pocas profesiones, casi ninguna, tienen esos requisitos para acceder, ejercer y mantener el ejercicio. Es una oportunidad de elevar el rango profesional.
ARTÍCULO PUBLICADO EN LA REVISTA PYMESEGUROS Nº 107